“El incendio lo causó
la impaciencia, te marchaste antes de tiempo. Al volver viste el fuego a lo
lejos, provocaste tú el incendio. Humo en el aire se consume en el olvido,
restos quemado, ya no hay nada todo ha ardido” (Diego Escriche, Incendio).
Allá en España pese a que las modas actuales están muy
distantes del rock, se puede decir que a lo largo de la historia reciente el
estilo igualmente le ha sonreído al país, claro, siempre y cuando estemos
hablando de la corriente alternativa que ya iniciara en los noventas con Los
Planetas y Sr. Chinarro y que sigue dando frutos hasta nuestros días con referentes
como El Columpio Asesino o Triangulo de Amor Bizarro coincidente mente dos
bandas influenciadas por el post punk pero con fuertes estribillos pop y uso de
elementos electrónicos.
Uno de los nuevos hijos de esta corriente se llama La Plata, agrupación que publicó a principio de año su LP debut “Desorden” después de haber tenido
una buena recepción su EP del año 2017 titulado “Un Atasco”. Como todo disco debut
este trabajo nos muestra a una agrupación con muy buena actitud y con la
intención de presentar un sonido propio e identificador, algo que se puede
notar perfectamente a lo largo de estas 10 canciones que presentan la
singularidad de ser muy compactas, todas hacen uso de los mismos instrumentos,
suenan una detrás de otra casi sin pausas volviendo al supuesto desorden en algo bien estructurado, como una mini sinfonía pop rock de
30 minutos. Sólo una canción se sale del esquema pero su intervención es más
que necesaria.
En cuanto al sonido se pueden ver influencias bien claras
del rock alternativo británico, siendo bien puntuales suenan muy parecidos a los
primeros The Smiths y a los últimos Joy Division (Quizás también a los The Cure
Menos Dark) aunque también cuentan con reminiscencias de su post punk patrio, viniéndonos a la mente inmediatamente el nombre de Eskorbuto.
El trabajo se inicia con una suite de tres piezas que son
hits instantáneos a base de riff guitarreros y de sintetizador. “Fracaso” inaugura
el disco como una especie de dejavú, sí, parece hasta un cover de tan clásica que
suena la canción, una que tranquilamente Johnny Marr hubiera compuesto. Es rápida,
entretenida, bailable y enérgica ¿Qué más quieres?. Inmediatamente le sigue “Incendio”
con su letra tan descriptiva que nos hace imaginar todo lo que está ocurriendo en la mente del personaje.
Van solo dos canciones y ya estás enamorado del sintetizador que aquí nuevamente suena
bestial.
Pum! Tenemos otro pelotazo (¿Así llaman a los hits allá no?)
“Miedo”, que deja más espacio a las guitarras y es quizás el tema más adictivo
del trabajo por ser tan popera (aunque personalmente no me gusta la segunda voz
de fondo, me chirría bastante). Así termina el trío inicial más excitante de lo que va del año.
Obviamente que nos cansamos, y para aprovechar la
oportunidad de sentarnos y descansar es que está el himno dream pop “Me voy”, una
maravillosa pieza para estadios con letra que describe perfectamente los pensamientos de un joven confundido que debe terminar un ciclo en su vida. El bajo va marcando las
líneas de la canción (hasta se anima a un solo) acelerando poco a poco hasta
llegar a un maravilloso climax medio 'Heroes'.
Con “Tu Cama” volvemos al levantarnos del lugar de reposo
para volver a saltar y agitar nuevamente la cabeza con un tema que parece ser más
contemporáneo a Interpol y compañía. Sorprendentemente el disco no decae como es de imaginarse cuando un tema lento rompe con la estructura que estaba siguiendo, porque luego tenemos a la
enigmática “La Luz” que confirma que nada de eso pasará. Cuentan que Carlos Hernández
productor de “Triángulo” estuvo detrás del trabajo y escuchando temas como este bien que se nota.
Hasta las intros ya se vuelven diferentes para no acusarlo
de "disco monótono" llegando a “Espejismo” tema que paradójicamente suena más
luminoso que el track anterior y en donde los teclados se vuelven a lucir para
luego pasar al momento de la discordia según algunos (o la mayoría), la nueva
versión de “Un Atasco”, más ralentizada que la del EP. Posiblemente la
intención de este cambio era para que convierta en un tema lo “más The Smiths
posible”, más bailable (Sólo algo así puede explicar el modificar un hit
que ya gustó a toda la comunidad indie española). A mi sin embargo me encanta, es otro highlight del disco.
El cierre también es muy bueno, con dos ráfagas llamadas “Esa
Ciudad” y “Me Miras Desde Lejos”, la primera bien ensoñadora para esos momentos
en que buscas un poco de paz y la segunda bastante acelerada y juvenil, con un
riff muy llamativo y un cierre que obviamente nos deja con ganas de más. (¿Se
acabó? ¿Tan rápido?).
Bueno, así pasó fugazmente “Desorden” (título muy Joy
Division) una selección de 10 canciones con una media general de 2:30 minutos
para acompañarte cuando más gustes durante el día. Por cierto, La Plata había confesado
que con el disco querían sonar como las bandas clásicas de punk como por
ejemplo Ramones, donde todas las canciones de sus trabajos suenan parecidas,
pero siendo cada una un hit diferente de otro. Se puede decir que lograron su cometido,
la duración colabora y mucho para que no llegue a la tan temida monotonía.
Puede que a algunos les parezca un más de lo mismo, pero por
lo menos para mí no. Hasta ahora no he escuchado una banda de rock en español en el
2018 que suene tan bien y haga canciones tan pegadizas como La Plata, así que de
momento ellos ganan.
Puntaje del disco
1. Fracaso (8,5)
2. Incendio (8,5)
3. Miedo (8,5)
4. Me Voy (9)
5. Tu Cama (8)
6. La Luz (8)
7. Espejismo (8)
8. Un Atasco (9)
9. Esta Ciudad (9)
10. Me Miras Desde Lejos (8)
Especial para: Recomiendo que sea cuando estés estudiando algo, yo lo hice y se sintió muy bien.