“Siempre me sentí diferente de los otros niños en la
escuela. Pasé por un momento muy difícil porque era el chico que siempre andaba
con una gran variedad de personas. Seguí buscando a niños como yo, pero nunca
sucedió. Al final me dio una buena perspectiva… Empecé a entrar en el lado de
la producción de la música cerca del final de la escuela secundaria. Había
luchado contra la idea de perseguir la música porque todos a mi alrededor
estaban rapeando o haciendo ritmos. Parecía que la gente hacía música por las
razones equivocadas y sabía que no iba a crear nada que no tuviera un
propósito. Escribo porque siento que algo tiene que decirse” (Seth Nyquist,
entrevista a Pigeon And Planes, 2018).
Sólo una buena canción te puede llevar al estrellato, o sino
pregúntenle a Seth Nyquist, mas conocido ahora por su nombre artístico: MorMor.
Un chico de color canadiense que vive en Toronto y que con solo subir el video
de su primera canción a Youtube ya es considerado toda una promesa por la prensa
especializada norteamericana. Y es que su canción es muy buena.
No es diferente, no es experimental, no es arriesgada, pero
te impacta apenas al escuchar ese simple compás de batería inicial. Un indie
pop con todas las letras, que te sorprende con un riff de guitarra muy 2000’s cuando
lo que de seguro esperabas eran los famosos sintetizadores hipnóticos.
Pero lo que más enamora es la voz de MorMor tan cálida en toda
la interpretación, la cual se inaugura luego de un grito trillado de una mujer.
Ya después en el estribillo aparecen los synths y un gancho que parece un
silbido que es la cereza perfecta de este pastel (nada empalagoso) que nos está
enamorando actualmente a todos.
En el outro se presenta un excitante increscendo por parte
de la guitarra y la voz ve Nyquist que por fin se rompe, mientras en el video
nos muestra su rostro de sujeto jovial y tranquilo. Hablando del video, es cinematográfico
y muy recomendable; en él se muestra paisajes no muy conocidos de Toronto
(intencionalmente), y las tomas soy muy buenas. Posiblemente esto suma mucho
más a la gran “Heaven’s Of Wishful”.
El mismo artista dijo a los medios es que con esta pieza
quería mostrar su perspectiva de la ciudad en donde vive, lejos de lo que se
vende. A ello le añadió un toque religioso que bien se siente en el alma que
tiene esta canción que no sé ustedes, pero a mí me recuerda un poco a ese “One Of
Us” de Joan Osbourne, incluso por el mencionado video. Igualmente, por estilo
no se queda atrás lo último que ha hecho The Kooks (ejemplo: Westside).
Al ser su primera y única canción, ¿Publicará más próximamente?
Ojalá. Mientras tanto estamos frente a una gran apuesta, candidata a ser una de
las mejores del año y la cual recomiendo que todos la escuchen.
Puntaje de la canción
Especial para: Los domingos de flojera y buena música