El proyecto musical de Michelle Zauner, artista de 32 años con ascendencia koreana y norteamericana, había tenido un increíble ascenso en un periodo de tiempo que iniciaba con su lejano debut  Psychopomp de 2016 y seguía su aclamada continuación al año siguiente "Soft Sounds from Another Planet" pero que este se detuvo inexplicablemente . Desde entonces poco y nada hemos sabido de un posible tercer álbum, pues solo se ha dedicado en participar en varios festivales, publicar singles sueltos o afrontar una nueva faceta musical más modesta titulada BUMPER.

Por eso ha resultado ser una muy agradable sorpresa el saber de su nuevo sencillo "Be Sweet" que vendría a anticipar por fin su nuevo material "Jubilee" a ser publicado el 4 de junio, no solo por el cambio drástico de sonido, alejándose un poco del pop experimental y lo-fi de lo que nos tenía acostumbrados para sonar al pop de los 80's con un bajo dominante y sintetizadores, sino porque ahora se lo ve a ella más confiada, divertida y con ganas de ser una superestrella (Cabe recordar que sus primeras placas han sido una especie de ejercicio de superación tras haber perdido a sus padres tempranamente).

El resultado de este cambio es una de las canciones pop más pegadizas y a la vez encantadoras que se han hecho desde hace mucho tiempo (el pop de hoy apuesta más claramente a la extroversión y hasta sexualidad) en donde Michelle le pide a su pareja, quien al parecer ha fallado con ella, que sea más dulce como condición para que lo vuelva a aceptar en la relación, pues ella realmente todavía se siente enamorada, y la música que escuchamos acompaña perfectamente ese sentimiento.

No cabe duda que este temazo con un video que homenajea a la serie X-Files, será uno de los mejores del año cuando lleguemos a diciembre.

Al parecer, el 2021 será el año para la banda oriunda de Pennsylvania, pues los adelantos de lo que será su nuevo álbum "Entertainment, Death" anticipan que estaremos frente al trabajo consagratorio de este interesante grupo.

Spirit Of The Beehive se han caracterizado durante su joven carrera en deleitarnos con un rock psicodélico con melodías alucinógenas cargadas de cierta influencia funk o de la música electrónica. Para su primer single de este nuevo proyecto "There Is Nothing You Can Do" experimentaron con nuevos estilos como el synth pop y el noise, pero ya con el segundo tema que salió finales del pasado mes, es con el que se han ganado la atención los medios especializados y de más público.

Iniciando con un riff que parece sacado del debut de Interpol, "The Server Is Immersed" es un número sexy de rock psicodélico en toda la regla con una pared de sonido irresistible que crean la fusión de guitarras y sintetizadores y con las voces como si fueran de un joven Syd Barred. Es de esas canciones que se sienten como un viaje, o parte de él pues esta inicia con el que al parecer es el final de una canción anterior y se corta abruptamente en su final.

En este tiempo en que parecía que una banda psicodélica que presuma de guitarras como su instrumento principal ya no sería lo más cool, puede que el nuevo álbum de Spirit Of The Beehive venga cambiar con eso.

El reciente lanzamiento de Antón Álvarez Alfaro, más conocido como C. Tangana, pero hoy El Madrileño, fue anunciado con bombos y platillos como si estuviéramos ante el debut de la nueva gran superestrella de la música iberoamericana (trabajo perfectamente diseñado por su discográfica Sony), sin embargo el artista de 30 años ya era uno de los más representativos de la música urbana española de la última década, que vio como su primera alumna Rosalía se convirtió en fenómeno mundial, mientras que él con todos sus esfuerzos apenas era conocido afuera de su país.

En su nuevo trabajo "El madrileño", el cual le llevó más tiempo que cualquier otro proyecto que haya lanzado, "Puchito" busca a toda costa ese reconocimiento que se le ha negado, el talento que nunca fue acreditado como debía (fue uno de los productores de "El Mal Querer", uno de los discos en español más importantes de los últimos años), intentando seducir primeramente al masivo publico latino que hoy juega un papel importante para poner a un artista bien arriba a nivel mundial.

C. Tangana no es tan talentoso como algunos o no tiene precisamente una gran voz como otros, pero es un sujeto muy inteligente que ha sabido crear un personaje que acompaña perfectamente a la música egocéntrica que hace, y es de los pocos artistas urbanos de España que se ha mantenido en vigencia gracias a esa astucia. Y "El Madrileño" es eso, un disco muy astuto.

Toda interpretación en este disco, la mitad corre a cargo del madrileño y la otra mitad corre a cargo de la constelación de estrellas (y no tan estrellas) de distintas generaciones que colaboran en el conjunto quienes cargan prácticamente todo el peso del trabajo hacia su segunda parte. Es tan variado este disco y hay en él tantas  diferentes voces que pareciera ser que estuviéramos escuchando una playlist en aleatorio, que probablemente a los que estamos acostumbrados a escuchar álbumes no nos guste, pero a la nueva generación de playlist en streaming les encantará. Otro punto a favor para las ambiciones de Pucho.

De igual forma, a mi parecer que suene así no está bien, porque para eso uno graba un álbum, para que pese a la variedad de las canciones todas tengan algo de homogeneidad, o sino pregúntenle a los Café Tacvba que en "Re" dieron una clase magistral de eclecticismo e identidad musical. "El Madrileño" tiene eclecticismo, pero es un trabajo que le faltó haber puesto por encima la identidad, y como adelanté en el párrafo anterior, hasta pareciera ser que algunas de las canciones son más de los colaboradores feat. C. Tangana que del propio de C. Tangana.

Es al principio en donde Antón es quien toma las riendas con las sensacionales dos primeras canciones, "Demasiadas Mujeres" una marcha fúnebre flamenca y techno que nos da la vida cuando la escuchamos o la irresistible "Tú Me Dejaste de Querer" una triple fusión entre reggaeton, bachata y flamenco acompañado (inesperadamente) por Niño de Elche y La Húngara. También es destacable "Comerte entera", una bossa nova, funky trapera muy bien lograda, dándole un espacio respetuoso y merecido a Toquiho al final.

Por la misma línea sigue "Nunca Estoy" con la rompedora producción de su alma gemela musical Alizz que prácticamente viene unida a una deslucida "Párteme la cara" que lo único que logra es hacer innecesariamente larga a la canción anterior. Esto en colaboración con Ed Madverick, quizás el único colaborador que no toma el protagonismo dejando impregnado su estilo en la canción.

En "Ingobernable" se siente que hay demasiada gente, y es así, están Gipsy Kings, Nicolás Reyes y  Tonino Baliardo dando el inconfundible toque flamenco a la canción que funciona bien para armar una rumba. Así es, tiene esa lamentable línea de "Una pistola para gobernarte", aunque bailando puede que ni la notes.

"Nominao" es lamentable, y lo siento por el maestro Drexler que pareciera ser que fue sugerido a interpretar como trapero la canción innecesariamente. Tiene tantas melodías que ya hemos escuchado en varios R&B promedio que al primer minuto ya nos cansa. La nueva versión de "Un Veneno" incluye a otro maestro como José Feliciano y esta si resulta mejor, pero ya se nota que sin esa gran colaboración la canción no hubiese sido lo que es dejando a C. Tangana en segundo plano pese a ser quien más lineas tiene en la composición.

"Te Olvidaste" con Omar Apolo es un placer culposo, me gusta ese clima romanticón y tranquilo de un R&B que bien pudiera haber sido tranquilamente un bolero. Le sigue "Muriendo de Envidia" con Eliades Ochoa, una canción que es un bonito homenaje en vida al ex integrante de Buena Vista Social Club que nos hace mover a ritmo de salsa al final.

Y no faltaba el corrido tras la nueva ola tumbada, aquí en "CAMBIA!" la fusión esta bien lograda pues hace sonar a la canción más épica con las trompetas a lo "All of the Lights" de Kanye West. Le sigue el son "Cuándo Olvidare" termina con un spoken word de Pepe Blanco con el que capaz C. Tangana se haya sentido muy identificado.

"Los Tontos" es la última gran canción del disco, un dueto con la leyenda  Kiko Veneno que recuerda a esos flamenco pop de los 90s y nos emociona en cada "na na na na". Lastimosamente le sigue y cierra el disco esa broma de mal gusto llamada "Hong Kong" que demuestra que Andrés Calamaro ya es un completo dinosaurio a estas alturas, una anticuada y cursi pieza rock del cual te arrepientes de haber escuchado.

Conclusiones: Estamos ante un disco inteligente, hecho casi de forma calculada en cada arreglo para que Puchito sea el nuevo gran artista íbero de estos tiempos de pandemia en donde la música ha sido tan golpeada (No es un álbum que cambia la música o nuestras vida, pero la hace pasar bien mientras dur). 

Tiene canciones muy buenas, otras no tanto y una terrible abominación, pero el disco pasa el examen con honores porque el pop en español  tampoco nos ha ofrecido demasiado últimamente, y esto es de lo más osado que se ha lanzado en este periodo. Ah, y que de ganar un Grammy Latino creo que lo tendría merecido

Tal vez será el disco más identificativo del artista en el futuro (aunque su mejor obra seguirá siendo el sensacional LOVE'S) y es hasta ahora sin dudas el disco iberoamericano que más ha resaltado en este 2021.